Los más de 80 trabajadores con los que cuenta en la actualidad la Mancomunidad Cuenca Minera, entre personal administrativo, monitores y alumnos de los talleres de empleo en vigor, iniciaron ayer un calendario de movilizaciones para reivindicar el cobro de la nóminas pendientes y denunciar la precaria situación económica por la que atraviesa el organismo supramunicipal.
Los representantes de los trabajadores entienden que, esta situación es reflejo de la grave crisis que viene arrastrando la Comarca desde el cese de la actividad minera. Pero también creen que, a pesar de ser una situación anunciada, no se han llevado a cabo auténticos planes de desarrollo y diversificación que paliara el cese de la principal actividad económica de la zona.
Históricamente esta zona supuso una importante fuente de riqueza para la provincia y actualmente el sentimiento que se palpa, tanto en los trabajadores de la entidad como en la población, es de abandono, falta de solidaridad y escaso interés por parte de todas las administraciones hacia la Comarca.
Los trabajadores exigen a sus representantes políticos la garantía total y absoluta del cobro de sus salarios y la puesta en marcha de las medidas necesarias para paliar esta crítica situación y asegurar una pervivencia de futuro que, en estos momentos, no puede ser más incierto.
Por lo pronto, la Asamblea de Trabajadores acordó concentrarse a las puertas de los centros de trabajo mancomunados mañana martes y el próximo jueves, a la espera de cobrar las nóminas que se les adeuda. La Mancomunidad ingresó ayer la mitad del salario que faltaba para completar la nómina de mayo.
Por su parte, los alcaldes de los siete municipios que forman parte de la Mancomunidad Cuenca Minera mantuvieron durante toda la mañana de ayer una intensa reunión en la que analizaron la crítica situación por la que atraviesa el ente supramunicipal y las posibles vías de solución.
Los máximos responsables de las corporaciones mineras adoptaron ratificaron el compromiso de hacer frente a la deuda superior a los 2 millones de euros que los Ayuntamientos mantienen con la Mancomunidad Cuenca Minera, como primera medida de choque para buscar una solución inmediata a la situación actual que atraviesan los trabajadores de la entidad.
Según el presidente de la Mancomunidad y alcalde de Zalamea la Real, Vicente Zarza, si todos los Ayuntamientos pagáramos las cuotas que nos corresponde por número de habitantes no tendríamos este problema de liquidez “Tenemos una responsabilidad con todos los trabajadores de la entidad y por ello debemos hacer un esfuerzo importante con las ya muy desgastadas arcas municipales para poder ayudar al mantenimiento de la entidad comarcal”, dijo.
Zarza, que entiende perfectamente la preocupación de los trabajadores de la entidad, transmitió ayer un mensaje de tranquilidad a los representantes sindicales. “Tienen que confiar en nosotros porque estamos haciendo todo lo que está en nuestras manos para solventar esta situación, que no les quepa duda de que estamos con ellos”, comentó.
El alcalde de Nerva (Giner), Domingo Domínguez, único primer edil de signo político diferente al de sus compañeros de organismo, fue más allá. “Aparte de ponernos todos al día, como nuestro Ayuntamiento que, aún no habiéndolo hecho antes, ya ha realizado dos pagos a pesar de nuestras paupérrimas arcas, he animado a mis compañeros alcaldes a reivindicar la deuda histórica que la provincia de Huelva tiene con nuestra comarca, por justicia social”, destacó.
Mientras tanto, la presidencia de Mancomunidad Cuenca Minera negocia diferentes operaciones de crédito con distintas entidades bancarias para normalizar el pago de los sueldos a los trabajadores y poder acceder al adelanto de subvenciones que están pendientes de cobro.
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