martes, 5 de agosto de 2008

La Mancomunidad libera a los pueblos del 64% de las aportaciones

Extraído de Huelva Información

La presión financiera que ahoga a las arcas municipales de la Cuenca Minera, en especial, a los ayuntamientos de Nerva y Minas de Riotinto, ha recibido una bocanada de oxígeno con la reciente aprobación de los Presupuestos Generales de 2008 de la Mancomunidad, que reducen la aportación de los consistorios en un 64,1%.

Así, la cantidad de 1.287.914,1 euros que debieron transferir los 7 pueblos de la Comarca al ente supramunicipal en el ejercicio 2007 caen hasta los 462.449,58 euros en el presente curso. Un considerable descenso que, no obstante, como expone el presidente del órgano comarcal y alcalde de Zalamea la Real, el socialista Vicente Zarza, no redundará en una merma de las inversiones, puesto que, en paralelo, "se ha conseguido un incremento presupuestario de 649.886,13 euros para alcanzar la cifra global de 3.543.576,69 euros", un 22,5% más que el volumen de capital gestionado el año anterior (2.893.690,56 euros).

La existencia de mayores partidas para talleres de empleo emerge como el pilar fundamental del crecimiento de los Presupuestos Generales, en la medida en que, en 2008, se prevé la llegada de 2.067.234 euros para el desarrollo de tres programas: 'Odiel' (682.187,22 euros), 'Flamenco' (682.187,22 euros) y 'Traslasierra' (702.859,56 euros). En 2007, los talleres de empleo 'Navalmentiño' y 'Regeneración Medioambiental de Zalamea' absorbieron, en su conjunto, 992.747 euros.

De igual modo, desde la Junta de Andalucía también se ve impulsado, con 150.000 euros (un 20% más), el servicio de Andalucía Orienta, mientras que la ayuda de la Diputación Provincial en materia de desarrollo local asciende a 56.500,08 euros (el ejercicio pasado era de 47.000 euros). El soterramiento de contenedores, por otra parte, cuenta, de forma inicial, con una bolsa de 345.214,59 euros, aunque la cuantía final, como señala Zarza, dependerá de la actuación que cada ayuntamiento decida acometer en su localidad.

Otra de las novedades incluidas en el apartado de ingresos es la petición de un crédito a largo plazo de 171.127 euros. El objetivo es descargar a los consistorios mineros del peso que suponen para su economía determinadas inversiones como la construcción de la nueva sede de la Mancomunidad, la adquisición de vehículos o la renovación del mobiliario. La ejecución de la primera iniciativa requirió en 2007 un total de 314.893 euros, de los cuales 112.655,18 euros debían proceder de las arcas municipales.

Para hacer frente a este nuevo préstamo, así como al de 500.000 euros solicitado a finales del anterior mandato a La Caixa y al de 400.000 euros otorgado ahora por Cajasol para saldar la deuda contraída con los trabajadores en forma de retrasos en el pago de las nóminas, los presupuestos de 2008 contemplan un caudal de 95.000 euros en el cuadro de gastos financieros, 20.000 euros más que la cantidad que conformaba este espacio en el curso 2007.

En cuanto a los costes, resalta la disminución del capital que configura el capítulo de gastos de personal. Los 308.035 euros destinados por el ente supramunicipal al abono de salarios en 2007 se convierten en el presente ejercicio en 269.321,38 euros, un 12,57 por ciento menos.

Los argumentos con los que el máximo dirigente de la comarca explica esta situación se centran en que, lejos de una política de austeridad en lo referente a la plantilla, "han finalizado determinados programas destinados a la inserción laboral, al mismo tiempo que el Servicio Deportivo Agrupado (SDA) ha pasado a ser competencia de la Mancomunidad Andévalo Minero con la intención de abarcar a la totalidad de la Zona Centro de la provincia".

La crisis económica que azota a los ayuntamientos de la Cuenca Minera, con las serias dificultades que ello entraña para las arcas municipales a la hora de afrontar los pagos a la Mancomunidad, obliga a este órgano supramunicipal no sólo a hacer cálculos imposibles para sobrevivir, sino también a reducir al máximo la carga de los consistorios sin que ello derive en la inoperancia. La nueva estrategia que emprenderá, en esta línea, la institución que preside el alcalde de Zalamea la Real, Vicente Zarza (PSOE), radica en desechar la petición de subvenciones dirigidas a actuaciones que obliguen a los pueblos a aportar más del 15% del presupuesto. "Nos limitaremos, sobre todo, a proyectos que vengan financiados de un modo íntegro por las distintas administraciones". Se trata de una política de subsistencia considerada "imprescindible" por los regidores de la comarca para evitar caer en la ruina en los tiempos difíciles que corren.

Lo que sí se descarta, según se desprende de las palabras de la alcaldesa de Minas de Riotinto, la socialista Nuria Hernández, es el desmantelamiento de la Mancomunidad, entendida como "una estructura básica para el debate y la búsqueda de soluciones a los problemas de la zona y vital para la eliminación de posibles actitudes localistas que, al trabar la unidad de los 7 pueblos mineros, frenen el desarrollo socioeconómico de una tierra deprimida".

No hay comentarios:

Publicar un comentario