miércoles, 23 de noviembre de 2016

FIDEL, UN EXTREMO DE ORO.

Lo ha vuelto a hacer. Fidel sigue demostrando la calidad que atesora, y yo me alegro de que así sea.
Os dejo parte de las informaciones y crónicas sobre la actuación de Fidel en la última jornada.


"Fidel es un jugador de otra categoría, un extremo de oro que juega en la categoría de plata del fútbol nacional. El viernes hizo un señor partido dando pases espectaculares. El canal de la Liga 123 lo ha elegido como el mejor futbolista de la jornada número 15 en el Campeonato Nacional de Liga en Segund División. Estuvo espectacular. El Almería fichó a un extremo que es buenísimo."



"Un pasador de Primera. Fidel Chaves de la Torres (27 de octubre de 1989, Minas de Riotinto, Huelva) ha demostrado en las primeras 15 jornadas de Liga que tiene una zurda de oro para la categoría de plata.
El extremo onubense estuvo muy participativo en el partido ante el Elche, dando pases de categoría, como nos tiene acostumbrados.
Cuando Fidel está y el Almería está entonado, su zurda es de las mejores de la categoría de Segunda.
El futbolista tardó muy poco en aparecer en el partido de la jornada número 15 en el Estadio de los Juegos Mediterráneos. Primeros minutos y servicio de oro para el genio Pozo, pero el malagueño no estuvo fino para haber hecho el 1-0.
Pero Fidel volvió y estuvo sensacional en la jugada del gol del empate del Almería ante el Elche. Gran pase a Nano para que éste se la pusiera al almeriense Puertas para hacer el tanto del empate, pero Fidel tenía que volver a aparecer para fabricar el gol de la victoria.
Jugadón del Almería: José Ángel para Pozo y éste para Fidel; el onubense volvió a dar otro servicio de oro para que el Pichichi Quique firmara el gol de la victoria frente al Elche que entrena Toril.
Carrusel
Fidel se pasó por la zona mixta del Estadio de los Juegos Mediterráneos después del partido ante el conjunto ilicitano para analizar la actualidad de un Almería que vive muy feliz fuera de la zona de descenso en la clasificación de plata.
“Estoy muy contento por el partido que hicimos ante el Elche, pero sobre todo por los tres puntos que se han sumado frente a un rival de categoría que, en caso de ganar, se hubiera consolidado en la zona alta de la clasificación, pero nosotros hicimos un gran partido en nuestro campo”, ha asegurado Fidel.
El onubense recuerda que “supimos sobreponernos al gol del Elche que fue un infortunio con el tanto en propia puerta, pero entiendo que estuvimos muy bien en todo momento a partir del 0-1 para sacar el encuentro adelante en nuestro campo. Hemos sabido sufrir y ojalá entre más el balón en los próximos partidos a partir de ahora”.
Fidel se agarra a los partidos en el Estadio de los Juegos Mediterráneos porque “llevamos una racha muy mala fuera de nuestro campo. No nos queda otra que ganar los partidos en el Mediterráneo y seguro que la afición se fue contenta a casa tras la victoria”.
Entiende que “hicimos un gran partido tanto en el aspecto ofensivo como defensivo contra el Elche, y no recuerdo una gran parada de Casto en todo el partido. Ya toca pensar en el partido del sábado en Valladolid”.

Puedes escuchar algunas declaraciones de Fidel que el programa SER DEPORTIVOS de Almeria  emitio el pasado día 21. Para ello pincha AQUI y avanza hasta el minuto 16:53 de la grabación.

FUENTES:
La Voz de Almeria.
Cadena Ser Almeria
Youtube
 

jueves, 17 de noviembre de 2016

Alfredo Moreno y Gilberto Hernández descubren la identidad del chino enterrado en Riotinto

EDITADO EN HUELVA BUENAS NOTICIAS

'Jesús' Shong Diediez Meeme descansa desde 1917 en la Cuenca Minera, donde llegó con la compañía de equilibristas y gimnastas la Troupe See-Hee. Así se desprende del estudio realizado por Alfredo Moreno y Gilberto Hernández, que nos cuentan cómo han desentrañado la historia de este ciudadano asiático.

Fotografía de ‘Jesús’ Shong Diediez Meeme, el ciudadano chino enterrado en Riotinto
 

A modo de curiosidad, en Minas de Riotinto siempre se ha comentado entre los vecinos que en el cementerio del municipio hay un chino enterrado. Una historia que podría sonar justamente a cuento chino, el de ‘el chino de Riotinto’, pero que ahora, gracias a una investigación llevada a cabo por los onubenses Alfredo Moreno Bolaños y Gilberto Hernández Vallecillo, ha sido arrancada del imaginario colectivo para cobrar pleno realismo.
Al parecer, sí es cierto que los restos de un ciudadano del país asiático reposan en el actual camposanto de la localidad minera, un descanso eterno en nuestra tierra que fue completamente fortuito, pues el destino quiso que ‘Jesús’ Shong Diediez Meeme, natural de Pekín, falleciera en Riotinto el 13 de marzo de 1917 por causas naturales. Pero, ¿cómo han llegado a descubrir Moreno y Hernández la identidad del chino?
 
La clave, aunque parezca sorprendente, estaba en la escritora cántabra Concha Espina, autora de la novela El metal de los muertos (1920).

                                                    
Concha Espina asegura que durmió en Nerva en la cama donde días antes había fallecido un chino. / Foto: www.frasescelebres.com

Ésta vivió durante una temporada en Minas de Riotinto y Nerva para documentarse y escribir esta obra, en la que denunciaba las penosas condiciones en las que trabajaban los mineros de la época. Así lo explica el periodista onubense Juan Carlos León Brázquez en su último libro, El periodismo literario de una novela social. Génesis de ‘El metal de los muertos’, un ejemplar que presentó en la Cuenca Minera en febrero de 2015.
Durante este acto, al que acudieron Moreno y Hernández, León Brázquez dio lectura a un artículo titulado ‘Riesgo y aventuras del novelista’ que Concha Espina publicó en el diario La Libertad el 1 de julio de 1934 y que decía así:
"En Nerva no encontré más posada que el cuarto interior de una taberna, en cuya cama se había muerto pocos días antes un chino, perteneciente a una compañía de bailarines”.

Como es lógico, Alfredo y Gilberto asociaron este hecho que relataba Espina a la historia de la tumba del chino, y empezaron a investigar si se trataba de la misma persona. Al menos tenían una pista, el hombre formaba parte de un circo o espectáculo circense itinerante, algo así como un Circo del Sol en nuestros días. Si eso era así, probablemente los medios de comunicación de la época se habrían hecho eco de la llegada de la compañía a la provincia de Huelva.
 

Tirando de hemeroteca, dieron con varias noticias sobre la Troupe See-Hee, un grupo de artistas chinos de la provincia de Shantoh, en concreto dos mujeres y cinco hombres, que realizaban juegos malabares y acrobáticos y que estaban de turné por España tras haber pasado por teatros de Francia, Inglaterra, Alemania y América. En nuestro país debutaron en Reus, en mayo de 1914, y luego actuaron en ciudades como Valencia y Madrid.
Asimismo, los investigadores hallaron en la Biblioteca Nacional ejemplares de la revista de espectáculos Eco Artístico, que recogen que la compañía pasó por el Teatro Reina Victoria de Nerva y también por Minas de Riotinto, actuando en este último el 1 de marzo de 1917, según se desprende de un artículo localizado en el diario onubense La Provincia.
En este mismo periódico, días más tarde, en concreto en la edición de noche del 14 de marzo de 1917, Moreno y Hernández hallaron la siguiente información:
"Hoy se ha verificado el entierro del cadáver del que fue en vida padre del director de la troupe «See Hee» que en la pasada semana actuó en nuestro coliseo. Enviamos nuestro sentido pésame a la familia”.
            


Así pues, no había duda de que el cabeza de familia de la compañía china había muerto en nuestra provincia. Ya con los datos en la mano, los onubenses acudieron al Registro Civil de Minas de Riotinto, donde encontraron el acta de defunción de ‘Jesús’ Shong Diediez Meeme, natural de Pekín y fallecido en la localidad minera el 13 de marzo a las 19.00 horas por un carcinoma de estómago a los 61 años. Estaba casado con María Shong y tenía dos hijos, Shong Sie Hei, al que llamaban José, director de la Trop See-Hee, y Chimbon.

 
En cualquier caso, Jesús el chino fue enterrado en el cementerio católico de Riotinto (ni en el civil ni en el protestante), situado por entonces al norte de la barriada de Mesa Pinos. De cómo fueron las pompas fúnebres, los investigadores han hallado un relato en el libro Recuerdos de sucesos ocurridos en Minas de Riotinto, de Fernando Durán García, en el que se recogen narraciones de principio de siglo XX sacadas de notas escritas por Manuel Durán Pernil, padre del autor. Así, en la publicación se lee textualmente:
“El entierro salió desde la fonda de Tía María que estaba en el Coso o sea frente a la estación de ferrocarril, por una carretera que iba desde allí por el Ayuntamiento viejo y llegaba a la ermita de Santa Bárbara y al Cementerio. En el entierro quemaban papeles y le echaban arroz”.
 
Pero la historia de Jesús el chino no acaba aquí. Unos años después de su fallecimiento, el municipio de Riotinto construyó su actual cementerio, el de Santa Bárbara, en la zona de Fuentefría y, como no, los restos que reposaban en el más antiguo fueron exhumados y trasladados al nuevo. Los de Shong también se depositaron en este camposanto. Al parecer, aunque su lápida original se perdió, en la nueva tumba, que se encontraba a la izquierda del pasillo central, unos 20 metros antes de llegar a la capilla, le colocaron una bonita ornamentación, una especie de baranda de hierro, todo ello según recordaba el padre de Fernando Durán y que éste recogió en el libro antes citado.
Pero aquella decoración y todo lo que rodeaba a la tumba desapareció, dejando un hueco ‘en blanco’ en el suelo, aunque hay vecinos que aún la recuerdan, como el propio Alfredo Moreno, quien con 15 años asegura que visitó el camposanto y le llamó la atención la ornamentación y la extraña letra que tenía una de las tumbas…
 
A pesar de que el tiempo borró las huellas de la existencia del chino, “los hijos del anterior sepulturero de Riotinto, Manuel y Juan José Rocha Sánchez, se acordaban de la situación de la tumba, justo donde decía el padre de Fernando Durán, a mano izquierda del pasillo, antes de llegar a la capilla”, explica Moreno.


Gilberto Hernández y Alfredo Moreno junto a Manuel Rocha, hijo del anterior enterrador.

 

Pero para corroborar que aquella era la morada eterna de Jesús Shong, los investigadores pidieron al actual sepulturero de Minas de Riotinto, Antonio González Sutilo, que buscara en el libro de apuntes del propio cementerio, a ver si había algún rastro del artista asiático. Así, hasta que un día, éste llamó asegurando: “He encontrado al chino”. Y exactamente ahí estaba, donde lo recordaban los vecinos, en la cuartelada 6, fosa nº 47, hoy calle Santa Elena nº 47, donde fueron depositados los ‘restos de Jesús Shong chino’ el 17 de abril de 1923 según aparece en las notas del sepulturero.
 
Resuelto el misterio, como curiosidad cabe destacar que el Archivo China-España, un proyecto de la Universitat Oberta de Catalunya financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación que representa una gran base de datos virtual sobre la presencia china en nuestro país desde el siglo XIX, no tenía conocimiento de la defunción de Shong en Riotinto hasta ahora. “Sabían que la Troupe See-Hee había actuado en España, pero no que uno de sus miembros había fallecido y estaba enterrado aquí. Por eso están muy interesados en nuestra investigación”, explica Alfredo Moreno.
 
Otra de las peculiaridades de esta historia, según apuntan sus autores, es que el hijo mayor de Jesús tuvo una niña dos meses después de la muerte de su padre. La niña, nacida en un pueblo de Valencia, se llamó Jua-Land, aunque más tarde, en 1928, fue bautizada en Madrid y pasó a llamarse María del Pilar. Desde muy pequeña y hasta que su padre disolvió la Troupe en 1927, la joven trabajó en la compañía familiar, convirtiéndose más tarde en una cupletista muy conocida en los teatros españoles, Pilar Shong, además de hacer sus pinitos como actriz en varias películas de los estudios cinematográficos de la U.F.A. en Berlín.
Pilar Shong, nieta de Jesús, fue una conocida cupletista española



 
 
¿Nueva fosa de la Guerra Civil en Riotinto?
 
Por otro lado, al margen de la apasionante historia del chino de Riotinto, durante su investigación, Moreno y Hernández han encontrado indicios para afirmar que en el cementerio de Santa Bárbara existe una fosa común de la Guerra Civil de la que no se tenían noticias hasta ahora. 
 
Al parecer, buscando en el libro de apuntes del anterior sepulturero han encontrado nombres que no están registrados en ningún otro sitio. “De todos estos cadáveres hemos encontrado las tumbas de cuatro o cinco diseminadas por el cementerio, pero los demás no sabemos dónde están enterrados”, explica Alfredo. Ello les ha llevado a pensar que existe una fosa común en el camposanto y además tienen cierta idea de la localización de ésta, en un sitio “donde no se han hecho más enterramientos. Sí a un lado y otro de este emplazamiento, pero no en él”, asegura el investigador.
En este sentido, los onubenses están  llevando a cabo un trabajo sobre Memoria Histórica que esperan que sea tan fructuoso como el de la resuelta identidad del chino de Riotinto.